El artículo analiza la actual transformación económica y social de Andorra, centrada en aprovechar el entorno natural y la calidad de vida para atraer a residentes, turistas e inversores. En concreto, destaca el «Andorra Health Destination», una asociación destinada a promover el turismo de salud y bienestar en el país, que engloba centros médicos, de belleza y balnearios especializados, así como hoteles e instalaciones de bienestar. También se debaten los retos de competir con destinos de turismo médico ya establecidos, como Barcelona, que ofrece una amplia gama de especialidades y tecnología punta. El objetivo actual es desarrollar una reputación de excelencia en medicina y atraer talento internacional, centrándose en el antienvejecimiento, la nutrición, la gestión emocional, la genómica, la longevidad y el diagnóstico por imagen.
En conclusión, aunque reconoce los progresos realizados en el turismo de salud y bienestar, el autor anima a adoptar un enfoque más ambicioso para posicionar a Andorra como un destino internacional líder en estos campos, apoyando la idea de que aún queda mucho trabajo por hacer, pero el potencial es sustancial.